Me doy de baja en AEDEAN, la Asociación Española de Estudios Anglo-Norteamericanos, donde estaba pagando cuotas desde mediados de los años 80. A los congresos ya dejé de ir hace veinte años, así que en realidad interactuaba poco con la asociación, y además dejaron ya de mandarme las actas y las revistas en papel. (Lo de hacerlo en electrónico se lo sugerí yo mismo como hace 25 años, y entonces les debí parecer un orate).
Bueno, lo de que interactúo poco es un decir. Este es el Twitter de Aedean, del que ya veré si me doy de baja o no:
https://twitter.com/search?q=%40aedeaninfo&src=typed_query&f=live
Me parece que soy demasiado hiperactivo para una asociación tan incomunicativa. Pero lo que me ha decidido a darme de baja es que me han bloqueado en el Facebook de la asociación. Supongo que también por abundar demasiado (no tanto como en Twitter) y no al gusto del Administrador. (Lo de siempre: políticas, vacunas, mascarillas, demasiado off-topic). Me suele pasar, últimamente, en mis empeños académicos. De hecho, en el Facebook de AEDEAN bloquearon la posibilidad de aportar publicaciones y comentarios en cuanto empezaron a llegar (casi en exclusiva) mis publicaciones y comentarios. Procuré argumentar que la culpa no era mía por participar, sino de quienes no participaban, e intenté hacerles ver el absurdo de una red social que no permite la participación. Pero que si quieres. No sé, igual ahora, conmigo bloqueado, sí que vuelven a abrirlo a la participación.
Pues me iré en busca de otros pastos, "Tomorrow to fresh woods, and pastures new." Look homeward, Angel.
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