El triunfo de la verdad... oficial
Publicado en Terrorismo. com. José Ángel García Landa
Tras
una serie de retrasos y torpezas iniciales (comenzamos con "Buon
Giorno" y un pique del traductor de italiano), pasa el juez Gómez
Bermúdez a la lectura de un resumen de la sentencia sobre la matanza del
11-M. En resumen:
Comienza diciendo
que se limitará la sentencia a considerar la culpabilidad o no de los
encausados, pues otras consideraciones no son relevantes. (Es decir, no
se investigan los últimos porqués).
No existe indefensión para los arrestados en prisión preventiva, pues se conocían elementos del proceso desde hace años.
Se rechaza la nulidad por la falta de autopsias de Leganés–
de "los suicidas de Leganés"—pues hay informes médico-forenses.
Oficialmente válidos.
La Kangoo: el
tribunal no asume la tesis de que en la kangoo y el Skoda se monten
todas las explosiones, pero esto no afecta al fondo. La actuación
policial sobre la furgoneta fue "escrupulosa", y la cadena de custodia
está plenamente acreditada. El juez considera suficiente la afirmación
de que no se perdieron de vista la furgoneta o los efectos en ningún
momento, y de que la cadena de custodia es válida a efectos oficiales.
En Leganés y Chinchón, por tanto: identidad de los detonadores, y
de los participantes. Los demás objetos hallados en la furgoneta son
corrientes y de uso común, reconocidos por el propietario de la
furgoneta, Garzón Gómez. ¿Que los policías no los vieron ni los hicieron
constar en sus declaraciones? No tiene base alguna esta afirmación,
dice el juez. Las partes mezclan en "totum revolutum", dice, la cadena
de custodia con la afirmación de que la bolsa no estaba entre los
objetos custodiados.
Si la mochila
fuese falsa, argumenta el juez, no hay cadena de custodia que valga,
sería irrelevante el fallo en la custodia, dice (¡¡os-trás!!).
Sería otro delito, que no tiene que ver con la cadena de custodia; los
partidarios de esta teoría se limitan a insinuar que pudo ser puesta
allí. El tribunal no encuentra indicio alguno sobre el particular. No es
aceptable la nulidad de la mochila por prueba falsa. (Una
falacia de razonamiento introducida por el presidente del tribunal...
escandalosa. Escandalazo, que diría la vicepresidenta).
"La prueba es auténtica", pues: —la bolsa del parque Azorín
procede de la Estación del Pozo, el tribunal no tiene dudas al respecto.
Nunca se ha roto la cadena de custodia (cuando vuelven los policías a
ver los efectos, dice, seguían allí las pruebas).... Reconoce el juez
"el extravagante periplo de los efectos", pero dice que carece de
efectos judiciales, ni es para él indicio de nada. (O sea, que a la vez una actuación irreprochable, y una cosa extravagante que no se debe repetir –e indicio de nada).
Los detonadores, temporizadores, etc., son los mismos en todos
los casos (El Pozo, Atocha, Azorín, Leganés)... Todos los detonadores
proceden de Mina Conchita. Las tarjetas telefónicas son todas de la
misma partida vendida a Yagual Mundo Telecom. La tarjeta encontrada en
Chinchón es una de esos 30. La bolsa de basura también es igual. Hay
conexiones suficientes, a juicio de la sala, entre todos los indicios de
los artefactos explosivos.
Contra otras
causas de nulidad aducidas por la defensa: El jefe de seguridad de Amena
no vulneró ninguna norma al facilitar a la policía el punto de venta de
las tarjetas; los datos mismos se facilitan sólo con orden judicial.
Toda la dinamita procedía de Mina Conchita. (¿?—Si no se podía determinar cuál era, dice el propio juez!!) El explosivo: Goma-2 Eco. En los trenes no se sabe con certeza (no ze sabe con azoluta certeza", dice literalmente) cuál era el explosivo, aunque sí se sabe que era dinamita de Mina Conchita; pero en la vía del Ave y Leganés era Goma-2 Eco de Mina Conchita. Es suficientemente probatorio. (Para el tribunal... para el tribunal.).
¿Documentación de ETA en los escombros de Leganés, según
adujeron las defensas? OK: un policía vecino había estado destinado a
seguimientos, y reconoció los documentos como suyos, se le devolvieron.
La documentación no era de interés para la investigación, y nadie pidió
que ese policía testimoniase. (Ni el juez. Cosa ciertamente pasmosa).
Identificación por huellas dactilares, genéticas, de los de Leganés... suficientes para el procedimiento. (No se aprecia nada atípico en los indicios que rodean estas muertes).
La falta de control en la mina, y la connivencia de los
encausados, fue la causa de que se pudiese sustraer el explosivo. Está
probado que en 2004 seguía circulando la Goma-2 EC aunque ya no se
fabricaba. Que seguía en buen estado, y podría haber servido para el
atentado.
El tribunal da por buenas
las declaraciones relativas a los explosivos de Montoya Vidal y los
demás encausados (menos en sus aspectos autoexculpatorios). El Chino y
otros recogieron los explosivos en Avilés, según han declarado también
otros testigos incidentales.
Las
relaciones con ETA alegadas por las defensas (relaciones entre presos,
cursillos de etarras en países árabes, etc.)—no son probatorias: por
ejemplo, la ertzaintza extiende un certificado donde declara que no le
consta que ETA use Goma-2. Entre informes de directores de prisiones y
policiales, nada avala la tesis de la defensa.
(Inciso meditativo con la definición de terrorismo para el
juez: la víctima es un mero instrumento, y se ataca la raíz del Estado,
el delito tiene pues "un plus estigmatizante para la víctima").
Se establecen indemnizaciones: de 30.000 a 1.500.000 euros
(máximo para 7 personas más un caso especial por el estado vegetativo de
Laura Vega). Se dividen los niveles de indemnizaciones en varios grupos
según los daños recibidos.
El juez, pues,
avala todos los datos de la versión oficial, relajándola un tanto en lo
referente a cuestiones insuficientemente probadas (así, absuelve a El
Egipcio por falta de pruebas).
Y como otros
jueces una vez han decidido dictar sentencia, pierde la voluntad de
sopesar, en el éxtasis de la resolución, y se pasa a defender la propia
versión como si el juez fuese parte interesada, y todo estuviese
súbitamente claro en blanco y negro.
Así
establece lo que en la SER llaman la "verdad judicial" del asunto—a no
confundir con la verdad, claro. La verdad judicial, si bien es verdad
(más para unos que para otros) no es, contrariamente a lo que uno podría
creer por los ecos de la frase, toda la verdad—a veces ni siquiera es nada más que la verdad.
Al trullo van (o más bien en el trullo siguen) cuatro chorizos que
ya tienen (bueno, ni cuatro...): culpables sin duda, pero también chivos
expiatorios. Cerebro, no hay, o no se le espera. O explotó en
Leganés... Los "autores intelectuales" propuestos por la fiscalía, con
el Egipcio a la cabeza, son absueltos, con lo cual la conexión con la
guerra de Irak resulta indemostrada. Pero quién diseñó u ordenó el
atentado, misterio misterioso—no parece que sea cosa que intrigue al
tribunal.
No se abren acciones contra los policías que
ocultaron pruebas, ni interesan las pruebas falsas encontradas, y en
general hay ceguera selectiva de cara a las conexiones policiales de
todo el asunto. No echa en falta el tribunal ninguna necesidad de
investigar más quién movió hilos para montar este atentado, o quién
impidió que se impidiese. No hay ningún interés por las presiones y
manipulaciones policiales, o las sorprendentes y continuados controles a
que se venía sometiendo a la banda. Lo que sí hay es la posibilidad de
sentar una verdad oficial, y esa será la verdad—a efectos oficiales.
Qué bien, desmontadas las teorías de la conspiración.
Resulta que no había conspiración, sólo una conspiracioncilla de
chorizos y confidentes policiales. Menos mal, que si llega a haber
conspiración... cae el reino.
Pero lo
importante: si nadie recurre, se recibirán las indemnizaciones, que es
lo que cuenta a estas alturas para los directamente perjudicados.
Para Zapatero, que sale volao a hacer declaraciones— modélico:
esto ha sido modélico, la "averiguación imparcial de la verdad y la
protección de los derechos de las víztimas con todas las garantías que
el estado de derecho asegura", asegura. Y finito.
Oh but you who philosophize disgrace
And criticize all fears,
Bury the rag deep in your face:
Now it's the time for your tears.
PS: También ha habido muchas
absoluciones, más de las esperadas (sobre todo sorpresiva la de los
Toro), y sólo calderilla de condenas para algunos muy responsables...
Todo lo no suficientemente probado a gusto del juez, un gusto que
naturalmente debe ir con póliza certificada—o es un gusto especializado.
A mí lo que más me ha gustado así como gusto
especializado ha sido la conclusión de la cadena SER: radiante,
exultante, dándose puñetazos en el pecho y gritos de Tarzán. Algo debe
ir mal, por tanto... Como muestra un botón, sacan a hacer declaraciones a
una víctima como portavoz de la autenticidad, un "chaval", que nos
regala esta perla de doublethink, para ir abriendo boca:
"Sólo pido que no se haga un uso partidista de la sentencia,
ni se utilice para la confrontación política. Y, una cosa más: también
pido que dimita toda la cúpula del Partido Popular y se retiren de la
vida política, pues han quedado totalmente desacreditados".
—hermoso, verlo tan en estado puro, ¿no?
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