España, como siempre, ridícula y servil

En cuanto a la intervención en Siria. Mariano Rajoy—Mariano— vende barato el apoyo a Obama, metiéndose en un fregado que ni le viene ni le va. E igualmente insensata y abyecta es la postura de España en tantos otros asuntos, todos los que toca, de hecho. Pero para qué extenderse más. Hoy hay en EsRadio un programa de Sin Complejos donde lo debaten por extenso.

Comenzando por un buen editorial, "Pan y Circo"—contra los Juegos Olímpicos de "20020", que tan caros nos han salido ya a estas alturas, por obra y gracia del manirroto ministro de Justicia. Que mejor estaría en un banquillo que al frente de la justicia española. Un país de memos, gobernado por delincuentes a quienes elegimos, votándoles como borregos descerebrados a pesar de su currículum deslumbrante en letras de neón.

Y sobre el tema de Siria, una preguntita, a ver. Esas prisas por gastar misiles, a cuenta de los lobbies de Washington. Se supone que el gobierno de Siria ha cometido algún acto criminal internacional. ¿Acaso, antes de echarle una lluvia de misiles a los sirios, han manifestado los americanos, ya no digo los españoles, su voluntad de derrocar a ese gobierno? ¿Hay órdenes internacionales de detención contra Al Assad y sus ministros? ¿Le han embargado las cuentas en Suiza que tenga, y detallitos de estos?

Aquí el Nobel de la Paz Obama se está retratando una vez más, como otro bombero incendiario que no quiere pisarle la manguera a los otros bomberos. Y Rajoy, el bombero torero, para qué decir nada de él a estas alturas. ¿Conocen a alguien que le vote, o que le haya votado? Pues trabajen por ahí, por hacerle entrar en razón al votante del PPSOE, si creen que vale la pena hacer algo por este país.

País de idiotas—y de golfos

 

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