Un artículo sobre metáforas de epidemias y LGBTifobia. De Unizar, por cierto, muy presente en The Conversation:
Hijazo-Gascón, Alberto. "'Hay una epidemia de niños trans': Virus, metáforas y deshumanización." The Conversation 30 March 2023.*
https://theconversation.com/hay-una-epidemia-de-ninos-trans-virus-metaforas-y-deshumanizacion-200669
2023
Comentario que le pongo a un comentario que le ponen:
Javier V V Garcia
Registro realizado vía Google
La cuestión, Javier, es que todo depende de “la agenda.” La agenda globalista está en plena promoción del transexualismo: creo que es algo bastante obvio por ejemplo en la actuación de nuestro ministerio, y en los efectos de estas políticas que han resultado en la multiplicación por miles de los casos de transexualidad (y la proliferación de clínicas para el ‘tratamiento’ de estas afecciones, si así puede llamárselas). Casos reales o inducidos o falsos, pero en todo caso promovidos y bienvenidos por la Agenda. En cambio, los valores cristianos a los que aludes no son en absoluto valores a promover desde la Agenda globalista, sino muy al contrario. Distinto sería si fuesen equivalentes, pero musulmanes—a cuenta de la promoción del multiculturalismo, el “respeto a las minorías”, etc.
Buenos días. Agradezco mucho el artículo pues aborda diversos aspectos sobre lo que es no ya bueno, sino necesario, reflexionar más allá de los marcos mentales que imponen los titulares de prensa o mensajes breves de numerosas redes sociales.Los calificativos que cita en el artículo para personas, independientemente de su edad, trans o cualesquiera orientación sexual llevan implícita una carga negativa, entre muchas posibles descripciones, que además implica o se desliza fácilmente, a un"juicio" personal. Igualmente, la suposición que se hace respecto a descripciones similares para creyentes religiosos, no es, igual y tristemente, una suposición sino una realidad. Sirva a modo de ejemplo la aseveración textual en The Conversation por un profesor de investigación en un artículo (con el que fue posible manifestar la disconformidad en un tono correcto), siguiente “[…] adoctrinar a la población, como pretenden hacer los credos religiosos que quieren inocular desde muy temprano su verdad excluyente […]”. Esta realidad respecto a la creencia la religiosas también afecta a titulares de prensa y políticos actuales.Es realmente importante evitar el juzgar “mediaticamente” (y no por supuesto en ámbitos judiciales) a los individuos muchas veces incluso con nombres y apellidos.Esto, no obstante, no debería llevar a restringir ni censurar, pasando al extremo opuesto, el legítimo y necesario análisis y estudio de aspectos propios de la naturaleza humana (concretando según su artículo, en identificación sexual, creencias religiosas) desde, por ejemplo, la biología, psicología, ciencias sociales u otras ramas del saber.Atentamente,Javier.