Comentario que pongo a este artículo de The Conversation:
Aladro Vico, Eva. (Catedrática de Teoría de la Información, U Complutense de Madrid). "Watergate: Cuando el periodismo salvó la democracia." The Conversation 16 June 2022.*
https://theconversation.com/watergate-cuando-el-periodismo-salvo-la-democracia-184803
2022
Se nos ofrece aquí una versión idealizada del periodismo y su papel de defensor de la verdad y las libertades democráticas, ejemplificado en un caso mítico (y mitificado), el Washington Times del caso Watergate. La realidad, ay, es mucho más triste. El periodismo desempeña más bien el papel de manipulador y pastoreador de la opinión pública, y mucho más importante que lo que se dice o subraya es aún lo que se calla para crear la imagen de la realidad deseada por los financiadores del medio. Hoy, por ejemplo, hay un espionaje masivo no ya de la oposición, sino de toda la ciudadanía, a través de las comunicaciones electrónicas, que está dado por hecho desde la era Bush-Obama, y en absoluto piensa desmontarse, y es aceptado masivamente por la prensa y silenciado, con algún episodio de grititos como el tema Pegasus. La prensa está vendida a las subvenciones y a los sobornos, como pudo verse en las portadas uniformes de Iberdrola en 2020, y en las portadas coordinadas, las consignas de los partidos y las instrucciones de los Innombrables (Igual no era Iberdrola sino Endesa—o si no el Santander o Blackrock, igual da). La semana pasada el Expediente Royuela nos desvela los sobornos recibidos por prominentes comunicadores (incluidos “verificadores”) de numerosos medios. Y la prensa no se molesta ni en desmentirlo ni en comentarlo. ¿Para qué? Está mejor calladita al respecto.
Me responden:
Eva Aladro Vico
Catedrática de Teoría de la Información, Universidad Complutense de Madrid
José Ángel, lo que dices es totalmente cierto. Es un auténtico milagro que pueda dimitir alguien como el presidente de gobierno de un país por la tarea de los informadores. Es de otro universo. Y sin embargo, es a lo que hay que tender. Hoy extraditan a Julian Assange, un divulgador de los tejemanejes y trapicheos del poder, para encausarle por 18!!! delitos. Así estamos, y metidos en una temible guerra en la que no se nos ha consultado si entrar, y enemistados con el país que nos proporciona energía básica, por orden de altyos jerarcas extranjeros. El periodismo está bajo mínimos: por eso, precisamente, hay que pensar que se puede cambiar la sociedad y actuar a partir de la iniciativa individual. Por experiencia sé que una sola voluntad mueve montañas. Saludos!“
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