Bloquearme ahora, que soy un viejo profesor jubilado, es una cuestión de grosería, intolerancia, y falta de mentalidad dialogante, sin más.
Pero bloquearme hace cuatro años, cuando era profesor titular de la universidad, era, además, una ilegalidad flagrante.
No les daba yo un premio.
No sé si será casualidad, pero al poco rato resulta que no sólo tengo bloqueado el acceso a Twitter, sino tambián a todo el servidor de la Universidad de Zaragoza.
Les "abro un ticket" como dicen, en la plataforma de ayuda. A ver si están por ayudar... o por todo lo contrario, ya se verá.
_____
Parece que migran la web a otro servidor porque éste es vulnerable. Ya me hicieron la misma faena hace cuatro años, cargándose todas las direcciones electrónicas de las publicaciones.
En fin...
—oOo—
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se aceptan opiniones alternativas, e incluso coincidentes: