Nos ponen. Hoy llega mi Facultad a la portada de El Periódico de Aragón, y no por nada bueno, sino por la noticia de que "Denuncian plaga de ratas y pulgas" en el edificio de Filosofía y Letras. Hay que fumigar, no cabe duda. De todos modos, yo ratas no he visto, y pulgas no tengo (ni he visto a nadie que las tenga, todo lo más quizá alguno con rastas y pulgas). Una vez, recuerdo, sí me cayo una enorme —pero enorme—cucaracha encima de los hombros, Gregorio Samsa parecía. Cayó de un agujero del techo. Me acuerdo que estaba sentado escuchando un seminario, y un estudiante me dijo,
—Aaah....¡te ha caído un bicho encima! ¡Lo tienes aquí detrás!
y yo,
—Ah, vaya.... pues... quítamelo, ¿no?
—¡Es que es.... enorme!
—Hombre, pues razón de más para quitarlo...
Así que algún caso sí puede que tengamos, de ratas, pulgas y hasta de cucarachas mutantes. Habrá que fumigar. Pero tampoco se vaya a pensar nadie que esto son las plagas de Egipto. Las instalaciones son precarias, pero en general no se ven ratas corretear por allí.
Según tengo entendido, las plagas de distintos bichos se han notificado en los últimos años por el personal de la Facultad y se han ido progresivamente resolviendo a través de fumigación. Con todo, lo que hay que hacer es arreglar esa serie de desperfectos, huecos mal ventilados, agujeros y un largo etcétera que provocan que aparezcan estas plagas.
ResponderEliminarPulgas sólo he conocido una vez en la Facultad y era un compañero de clase que los lunes venía mal aseado del pueblo, de cuidar los gorrinos, burros y demás.
ResponderEliminarRatas no me constan. Cucarachas, puede ser.
Mientras no lleguen insectos xilófagos a las bibliotecas, estaremos a salvo.