viernes, 23 de junio de 2017

Retropost #1669 (23 de junio de 2007): Teoría interaccionalista del significado



En la Narrative-List se viene debatiendo el tema del significado de los textos: otra vez la vieja historia de si el lenguaje significa en sí mismo, como un objeto, o si es necesaria para su interpretación una referencia a la intencionalidad del emisor. Envío este mensaje, que viene a resumir en términos pragmáticos el paso de la Nueva Crítica formalista, al Reader-Response criticism, al materialismo cultural:

This debate could be rephrased in terms of Herbert Blumer’s symbolic interactionism, According to Blumer (and G. H. Mead and other pragmatists before him), there are three main theories about meaning:
1) Meaning is contained in the object (e.g. the words on the page)
2) Meaning is assigned by interpreters, it is subjective (early Stanley Fish, some aspects of intentionalism– only some...)
3) Meaning is created and recreated constantly in a process of social interaction and communication– in specific acts of interaction and communication. Thus, Wordsworth’s poem means in some respects what it meant to Wordsworth, then what it meant to later interpreters, and in other communicative encounters (e.g. here) it may acquire further meanings.

To my mind, (3) is hard to gainsay.

Jose Angel Garcia Landa
Universidad de Zaragoza
Lo de "to my mind" iba con un poco de segundas, debo reconocerlo. Porque la teoría número (3) sobre el significado, que es la propuesta por los interaccionalistas simbólicos, no logra librarse totalmente de la (1) y de la (2). Es decir, esos actos comunicativos y esas reformulaciones interactivas del significado se hacen continuamente por referencia o bien al significado "intrínseco" de un objeto (texto, etc.) —o sea, teoría número (1)— o bien oponiendo "lo que ese objeto significa" a "lo que significa para el intérprete". A este respecto conviene tener en cuenta que, siendo la semiosis lo que es, continuamente se generan significados locales o subjetivos para los objetos (o textos), y en principio, puramente en principio, cualquier cosa puede significar cualquier cosa. Así, "blanco" puede significar "negro", como por ejemplo en esta frase. Gran parte de lo que constituye las "comunidades interpretativas" que decía Fish son los principios de limitación a la fluidez de la semiosis: por ejemplo, qué sentidos están "objetivamente" en el texto—es decir, qué sentidos son compartidos por la comunidad de tal modo que no está sujeta a debate su interpretación. Ese acuerdo (siempre local y situacional) genera "lo que está en el texto", por ejemplo lo que llamamos "sentido literal". 

Así pues, si bien todas las asociaciones semióticas son iguales, algunas son más iguales que otras, y el problema de la interpretación nos lleva entonces a ver cuáles son los sentidos locales generados para tal o cual objeto, histórica y culturalmente. Pero es éste un proceso que no se observa desde fuera, puesto que el intérprete, como Heisenberg, está alterando el objeto interpretado con la existencia misma de su máquina de interpretar. La teoría interaccionalista simbólica sobre la semiosis, o el materialismo cultural, son excelentes instrumento de análisis cultural, pero eso no quiere decir que sean neutros o que estén culturalmente deslocalizados. Son instrumentos que al analizar un fenómeno cultural, no se limitan a entenderlo en sus propios términos (cosa que deben en cierto modo hacer, para hacerlo visible) sino que lo reducen a los términos de una teoría interaccionalista y materialista.

Se me objeta en la lista que si nos atenemos a (3) no podemos distinguir los significados verdaderos de los no verdaderos. Yo diría que sí podemos, precisamente por la implicación del intérprete a la que aludía. Por supuesto una interpretación será verdadera para tal persona precisamente por las razones por las que es falsa para otra, y así no hay verdad y falsedad "en sí" para los interaccionalistas simbólicos, sino sólo una verdad o falsedad interaccional. Lo cual no quita para que algunos "efectos de verdad" o "protocolos de verdad" sean más influyentes, poderosos, convincentes, etc. que otros. Para nosotros, claro, y para nuestros fines interaccionales.


Addenda: Otra respuesta a la lista, que se sigue preguntando por el intencionalismo en un tono excesivamente individualista a mi entender:

Perhaps there’s a paradox about language (and human action generally) which keeps complicating all the interpretive plans of men. (RATS! to quote Charlie Brown). It is that far from being alien to intention, the use of language, discourse, texts... is intentional through and through. Which means that linguistic structures, pragmatic maxims and textual protocols are made of sedimented intentions, which may keep functioning quite apart from any individual agency - because human agency is more collective than we tend to think (multitudes inhabit us, etc.). So, part of the work of interpretation is not so much to discern what is intentional and what isn’t, but rather to discern shades and kinds of intention, more or less individual, or more or less structural. But language is the machine of intentions, there’s no getting round that fact, and this becomes particularly clear when we find this recurring paradox: the production of extremely individual and intentional discourse which tries to negate the importance of intent and intention in the interpretation of discourse.

Jose Angel García Landa
Universidad de Zaragoza






—oOo—



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Se aceptan opiniones alternativas, e incluso coincidentes: