martes, 20 de abril de 2010

Hipertexto en retrospectiva


O en prospectiva, porque se trata de un texto profético. Por casualidad releía Hyper-Text-Theory, de George Landow y otros, un libro escrito hace dieciséis años cuando la Web estaba arrancando, no había Google ni Firefox ni Explorer, ni YouTube ni Yahoo. Lo reseñé poco después mientras empezaba a montar mi sitio web. Hace poco lo volvía a comentar a cuenta de lo mucho que han cambiado el hipertexto y la red en estos últimos veinte años de su existencia. Y ahora me llamaba la atención este párrafo tan presciente:

La respuesta a esta pregunta fundamental, "¿qué hará el crítico y teorizador de la literatura con el hipertexto?", está íntimamente relacionada con otra pregunta, "¿Cómo hará el crítico lo que vaya a hacer, sea lo que sea?" Naturalmente, si el hipertexto marca realmente un cambio importante de paradigma, uno puede esperar que la mayor parte de los académicos, críticos y teorizadores de la literatura impresa no harán nada en absoluto al respecto. Apartarán la vista, negarán, cuando se les apremie, que la ficción o la poesía hipertextual sean ficción o poesía de verdad, y en general expresarán gran afecto hacia el libro impreso—ocasionalmente hasta contrastando la experiencia de enfrentarse a los efectos supuestamente desnaturalizados y desnaturalizantes del texto en ordenador, con la de acariciar una novela victoriana encuadernada en lujoso cuero (....)
Sin embargo, he de preguntar otra vez, ¿qué debería hacer un crítico? La respuesta, al fin, ha de ser, escribir en hipertexto mismo. (...)

Los primeros intentos de escribir crítica y teoría en un entorno hipertextual sugieren que inevitablemente comparten la característica multivocalidad de este medio, su final abierto, su organización multilineal, su mayor inclusión de información no textual, y la manera en que reconfigura de modo fundamental el concepto de autoría, incluyendo las ideas de propiedad intelectual y de relaciones de status en el texto. (...) Lo que llamo de modo tentativo el género de crítica y teoría en hipertexto sufre el cambio de naturaleza que uno se encuentra al tratar con las concepciones de la textualidad, autoría y argumento basadas en el texto impreso; y esta reconceptualizacióin fundamental deriva del mismo factor: el enlace, en especial en un entorno de red. (...). Antes comenté la manera en que el uso de enlaces anima al autor y al lector a violar las fronteras de las disciplinas. No mencioné que tambien les anima a violar las fronteras estilísticas y genéricas. (Landow, "What's a Critic to Do? Critical Theory in the Age of Hypertext").

Profético ha resultado el texto para mí al menos, si mirando atrás veo cómo ha cambiado mi manera de escribir (para mal, dirían algunos) en los últimos años, y más específicamente desde que arrancó la Web 2.0 con los blogs. También es profético el texto en lo que se refiere a la reacción del mundo académico. Muchos de los escritos pseudo-académicos que hago aún tienen grandes herencias de la forma impresa, en especial los que redacto para el formato PDF. El PDF es una especie de texto impreso pasado a electrónico, y no es extraño que los universitarios y académicos lo hayan adoptado como su formato favorito cuando se ven obligados (por ley, por ejemplo) a difundir sus textos por internet. Ahora bien, donde Internet está en su salsa es en las formas donde hay mayor interacción de oralidad y escritura: en los blogs, en las redes sociales, en el e-mail. Se observará que en los PDFs el enlace está normalmente sólo para permitir acceder al PDF en sí, y quizá en alguna referencia bibliográfica. Las redes sociales quizá sean demasiado refractarias (todavía) a la actividad del pensamiento académico. Pero en los blogs sí puede observarse la transformación de la manera de pensar y escribir a que aludía Landow. En especial cuando están podridos de enlaces. Claro que ni el propio Landow sabía a qué se refería cuando nos animaba o se animaba a sí mismo a escribir "en hipertexto". Los blogs estaban en el futuro, y quizá todavía lo estén.

2 comentarios:

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